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Cómo encender una barbacoa con piñas

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Existen algunas técnicas que llevan siglos utilizándose para encender un buen fuego. Uno de ellos es el uso de piñas, las cuáles son muy comunes de usar cuando se va trata de una barbacoa. ¿Quieres saber cómo encender una barbacoa con piñas? Aquí te contaremos cómo podrás conseguir unas brasas perfectas con ellas, ¡sigue leyendo!

¿Por qué las piñas son buenas para encender barbacoas?

En muchos tutoriales, explicaciones o vídeos verás que mucha gente enciende el fuego de una barbacoa utilizando las piñas. También se utilizan para encender las chimeneas.

El motivo de su uso es porque las piñas tienen resina natural, lo que ayuda a que estas prendan más rápidamente. Además, dado que su superficie es más grande que las de unas pequeñas ramas, permite generar un fuego intenso y rápido. Por otro lado, el hecho de que tengan una composición dura y fibrosa, ayuda a que duren más tiempo y se consuman lentamente. Esto permite disfrutar de las brasas más tiempo.

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Tanto para madera como para carbón

Otra de las grandes ventajas de las piñas, es que se pueden utilizar para cualquier tipo de material. Ya sea que vayas a hacer una barbacoa de leña o de carbón, se puede utilizar las piñas como una fuente de combustible para alimentar el fuego.

Es importante recordar que, aunque puedes usarlo, los combustibles líquidos o las pastillas de encendido dañan severamente el sabor de los platos que prepares. Por ello, es mejor esperar a que se genere el fuego en lugar de jugar con el sabor del alimento.

Encender una barbacoa de carbón con piñas

¿Quieres usar las piñas para encender una barbacoa de carbón? Bien, aquí te vamos a explicar paso a paso como conseguirlo.

1. Elige bien el carbón que vas a utilizar

Es lo primero que debes de pensar. ¿Qué tipo de carbón es el que quieres utilizar? Sabrás que el carbón vegetal es uno de los más consumidos, especialmente porque es muy fácil de encender.

Pero tienes otras opciones, como por ejemplo el carbón de encina (que es tan usado como el vegetal), el de cabracho o el de cáscaras de coco. Este último tiene menos aroma que los dos anteriores, pero un poder calorífico muy bueno. Sumado al hecho de que generan menos humo.

2. Llegó el momento de encender el carbón

Elegido el carbón, ha llegado el momento de prender el fuego de la barbacoa con piñas. Para ello, coloca papel de periódico, unas bolas no muy apretadas, con unas cuantas piñas (dos o tres). Prende todo junto.

En el momento que veas que se va generando una llama, ve incorporando el carbón el carbón poco a poco, con el fin de que la llama no quede enterrada por el montón de rocas que le vas a echar encima.

3. Deja que el fuego respire para producir menos humo

¿No te gusta nada que se genere tanto humo mientras cocinas, verdad? Pues para ello tienes que dejar que el fuego tenga bastante oxígeno. Conseguirlo es fácil, puedes dejar espacios en los que no pongas mucho carbón. Así el fuego tendrá una ruta para disfrutar del oxígeno y conseguir una llama mejor.

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4. ¿Cuándo poner la carne en la parrilla?

En el momento que veas que el fuego ya se ha prendido, tendrás que esperar una media hora, si has puesto una carga media, o una hora en el caso de una carga completa.

Para disfrutar de una buena carne hecha a la barbacoa, no hay que ponerla en la parrilla hasta que las brasas están bien hechas. ¿Cómo se sabe esto? Las llamas deben haberse extinguido y el carbón tiene que tener una película, muy fina, de ceniza de color blanco.

Un pequeño truco para saber si las brasas están o no listas, es realizar la prueba de los 7 segundos. Esta consiste en colocar la mano abierta, a unos 10 cm de la parrilla. Si aguantas 7 segundos sin sentir que te quemas, es que las brasas están listas. En el caso de necesitar un fuego más fuerte, para pescado o cortes de carne más delgados, el tiempo de prueba será de 4 a 5 segundos.

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Encender una barbacoa de leña con piña

¿Prefieres disfrutar de tu barbacoa utilizando leña? Por supuesto, también puedes utilizar usar piñas para prender una barbacoa de leña. Mira, estos son los pasos a seguir:

1. Prepáralo todo en la barbacoa

Bueno, aquí todo depende de si tienes una barbacoa de obra o una pequeña. Si es una de obra, tendrás que poner varios leños formando una pirámide, dejando espacios para que luego el fuego pueda disfrutar del máximo oxígeno posible. Intenta que el grosor de la leña no sea demasiado ancho y que los trozos estén bien secos.

Justo en el centro tendrás que poner las piñas (unas cinco o seis), junto con varias bolas gruesas, de unos 5 – 8 cm de diámetro, de papel de periódico. Prende el fuego y espera a que este vaya creciendo, antes de empezar a usar la barra para remover las brasas.

Pero, ¿qué sucede si lo que tienes es una barbacoa pequeña? En este caso primero prende el papel de periódico con las piñas, utilizando alguna ramita seca o alguno de los trozos de leña, pero el que sea más pequeño. Luego ve añadiendo la madera, según vayas viendo que el fuego comienza a crecer.

Si esta es muy profunda, puedes hacer el truco de la pirámide, pero con trozos muy pequeños de leña, ya que al ser un espacio más pequeño podría ahogarse el fuego rápidamente.

2. Combina las piñas con diferentes tipos de madera

La piña no solo es un buen instrumento para ganar un buen fuego, también ayuda a darle un poco más de gusto a la comida.

Como bien sabrás, existen muchos tipos de madera que se utilizan para fabricar la leña para las barbacoas. Si quieres triunfar entre todos tus invitados, tu mejor opción será la de ir probando o combinando diferentes elementos. Así lograrás que tu comida tenga muy buen sabor.

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3. No ahogues el fuego

En el momento que necesites añadir más leña, hazlo lentamente, o podrías acabar ahogando el fuego mientras se van formando las brasas.

Saber si el fuego de tu barbacoa de leña está listo es muy sencillo, pues puedes realizar la misma prueba de los sietes segundos. Aunque en el momento que veas que queda poco de madera entre las brasas, será tu señal para ponerte a cocinar.

¿Usar otras cáscaras o pieles junto con la piña para encender una barbacoa?

Mucha gente que cocina a la barbacoa no lo sabe, pero igual que se pueden utilizar las piñas para conseguir que una barbacoa tenga buen fuego, se pueden usar otras para conseguir sabor. Naranja, limón, coco… todos esos alimentos que se usan para darle buen sabor a la comida cocinada entre sartenes y ollas, también se pueden trasladar a una barbacoa. ¿Cómo conseguirlo?

Tendrás que poner la cáscara del ingrediente en cuestión junto con las piñas en el momento de prender la barbacoa. De este modo, el sabor de la cáscara se irá fundiendo con el humo que salga de la barbacoa, y al colocar los ingredientes en la parilla y cerrar la tapa estos se inundarán de ese increíble sabor.

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Últimos consejos para encender barbacoas con piñas

Puede que al principio no te salga muy bien el encender un fuego de barbacoa con piñas. Pero tranquilo, porque aquí tienes unos consejos finales:

  • Igual que sucede con la madera, las piñas deben estar bien secas. Bien puedes usar algunas que recojas tu o bien comprándolas en saco. Se venden algunas que son muy especiales para encender barbacoas, por lo que tendrías que echarles un vistazo. Sobre todo porque son bastante baratas.
  • La cantidad de piñas que vayas a echar a la barbacoa determinará, en gran parte, la potencia del fuego. Es un buen alimento para las llamas, por lo que cuántas más piñas pongas en la barbacoa, más fuerte será el fuego. Ten esto muy presente a la hora de cocinar, porque para ciertos alimentos necesitarás más o menos piñas.
  • El lugar dónde ubiques la barbacoa será muy importante para conseguir un buen fuego. Evita que la zona tenga muchas corrientes de aire y que esté bien ventilada. Que el suelo bajo la barbacoa sea firme, sin vegetación, con el fin de evitar un posible incendio.
  • Cuando vayas a cocinar en una barbacoa con tapa, es mejor tenerla cerrada en todo momento. De este modo, especialmente cuando vas a utilizar algún añadido para darle sabor, la carne se hará mejor.
  • ¿Qué quieres repartir el fuego? El truco es bastante simple, solo tienes que remover las brasas. El punto en el que haya más brasas, será el que más calor dé. Para conseguir un fuego indirecto, aparta las brasas a los costados, pon el alimento a cocinar en el centro, y listo.
  • Ten mucho cuidado con la sal y otras especias que vayas a añadir a los alimentos. Estos tienen que añadirse cuando el ingrediente esté casi hecho, ya que algunas especias, como la sal, contienen mucha agua. Al calentarse sueltan el agua y estropean la preparación de lo que estás cocinando. Ándate con mucho ojo con esto.